Declaran la Inconstitucionalidad de la Prohibición del Glifosato en Misiones
El asesor legal de la Sociedad Rural Argentina, Ezequiel Cassagne, ha cuestionado la legislación de Misiones que prohíbe el uso de glifosato, considerando que esta medida tiene un impacto negativo y extremo en el sector agrícola, no solo en Misiones, sino en toda Argentina. En julio pasado, la provincia de Misiones aprobó la ley VIII-103, que promueve el uso de bioinsumos y prohíbe el uso de glifosato en su territorio dentro de dos años.
Cabe destacar que el glifosato es el herbicida más utilizado en el mundo y ha tenido un cambio significativo en la forma de producción agrícola, modificando los métodos antiguos de combate a malezas y el uso de herbicidas con efectos residuales perjudiciales para la naturaleza.
En efecto, la venta y el uso de glifosato están permitidos en Argentina por los organismos nacionales competentes. Por lo tanto, la ley provincial que prohíbe su uso viola diversas normativas federales que regulan este tema desde hace más de cincuenta años, incluyendo el Régimen de Sanidad Vegetal, el Registro Nacional de Terapéutica Vegetal y la ley de declaración de interés nacional de la sanidad de los vegetales y animales (ley 27.233), así como las distintas reglamentaciones emitidas por las autoridades nacionales en estas cuatro décadas.
Ezequiel Cassagne, asesor jurídico de la Sociedad Rural Argentina. «Esta ley draconiana tiene un impacto muy negativo y extremo en el sector agrícola de esa provincia y de Argentina en general», explicó.
Añadió: «Como siempre lo ha sostenido la Corte Suprema de Justicia de la Nación, la Constitución nacional ha querido unificar al país y no habría nación si cada provincia se manejara económicamente de forma independiente. A partir de esta ley, la provincia de Misiones prohíbe de manera absoluta el uso de un producto autorizado para su venta y comercialización por el Estado nacional».
Además, señaló que actualmente en más de 160 países se ha autorizado el uso de glifosato debido a su baja toxicidad y su falta de relación con el cáncer. Según un informe de 2016 de la Reunión Conjunta de la Organización de las Naciones Unidas y la Organización Mundial de la Salud, el glifosato no es cancerígeno, no provoca daño genético, no afecta el sistema nervioso, no causa malformaciones y no tiene efectos sobre órganos específicos tanto en exposición única como en exposición repetida.
«Con esta ley, Misiones está interfiriendo en políticas y regulaciones nacionales en una de las actividades económicas más importantes del país, obligando a los productores de la provincia a modificar sus sistemas de producción, lo que en muchos casos los excluye de muchos mercados internacionales», concluyó el asesor legal de la SRA.
