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El Gobierno Oficializa el Aumento del Mínimo No Imponible de Ganancias

A través del decreto número 473, publicado en el Boletín Oficial, el Gobierno ha formalizado el incremento del mínimo no imponible del Impuesto a las Ganancias, que entrará en vigencia a partir del 1 de octubre del presente año. Según esta disposición, ningún trabajador que gane hasta $1.770.000 mensuales estará sujeto al gravamen de Ganancias. Este monto se ha fijado equivalente a 15 salarios mínimos, vitales y móviles mensuales.

El decreto establece que «para el segundo semestre del período fiscal 2023, el monto de la remuneración o del haber bruto» considerado como mínimo no imponible de Ganancias «ascenderá a una suma mensual equivalente, conforme al monto que esté en vigor el 1 de octubre de 2023, a quince salarios mínimos, vitales y móviles (SMVM)».

El Ministro de Economía, Sergio Massa, destacó a través de su cuenta en la red social X (anteriormente Twitter) que «desde el 1 de octubre ningún trabajador que gane hasta $1.770.000 pagará el impuesto a las Ganancias» y expresó la necesidad de que esta medida se convierta en ley, instando a los diputados y diputadas a cumplir con el compromiso de proteger los salarios de los trabajadores.

El decreto también especifica que este nuevo mínimo no imponible se aplicará al cálculo de la segunda cuota del Sueldo Anual Complementario (SAC). La Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) será responsable de ajustar los importes de la escala progresiva con efectos desde la entrada en vigencia de este decreto hasta el 31 de diciembre de 2023.

La iniciativa tiene como objetivo que el impuesto recaiga exclusivamente sobre los ingresos más altos. En los considerandos del decreto se destaca que se busca que el impuesto se aplique únicamente a los mayores ingresos derivados del trabajo en relación de dependencia y jubilaciones de privilegio, definidos como aquellos que superen el equivalente a quince salarios mínimos, vitales y móviles mensuales, que actualmente equivalen a $1.770.000. Se propone un impuesto cedular con alícuotas progresivas que oscilan entre el 27% y el 35%.

Asimismo, se señala la importancia de realizar ajustes en la Ley de Impuesto a las Ganancias de manera inmediata para garantizar que el gravamen afecte solo a los mayores ingresos, mientras se espera la aprobación de un proyecto de ley que refuerce esta medida.

Fuente: El Territorio