Tai Chi, el Aliado contra el Deterioro Cognitivo: Estudio Revela Impactantes Beneficios
El Tai Chi, reconocido por la Universidad de Harvard como un ejercicio beneficioso para adultos mayores, no solo ha demostrado ser eficaz contra los síntomas de Parkinson, sino que ahora se revela como una herramienta efectiva contra el deterioro cognitivo leve.
Una investigación reciente, publicada en Annals of Internal Medicine, sugiere que este antiguo arte marcial chino, caracterizado por movimientos suaves, técnicas de respiración y concentración mental, puede ser uno de los mejores ejercicios para contrarrestar el deterioro cognitivo leve. Este estado, descrito como una fase intermedia entre el envejecimiento normal y la demencia, afecta la memoria y la función cognitiva.
El estudio involucró a más de 300 adultos mayores con deterioro cognitivo leve o problemas de memoria autoinformados. Los participantes practicaron Tai Chi durante seis meses, dividiéndose en dos grupos: uno practicó tai chi cognitivamente mejorado y el otro tai chi estándar o estiramientos.
Los resultados fueron reveladores: el grupo que practicó tai chi cognitivamente mejorado experimentó mejoras significativas en la función cognitiva en comparación con el grupo de estiramiento. Estas mejoras se reflejaron en la cognición, la función ejecutiva y la memoria de trabajo, y persistieron hasta las 48 semanas.
El Tai Chi cognitivamente mejorado implica decir palabras y frases mientras se realizan posiciones diseñadas para mejorar la flexibilidad y el equilibrio.
Los científicos del Instituto de Investigación de Oregón, responsables del estudio, señalaron que este tipo de ejercicio podría «potencialmente reducir el riesgo de desarrollar demencia».
Estos hallazgos se suman a otros beneficios previamente identificados del Tai Chi, como su capacidad para mejorar la postura, la confianza, el manejo emocional, la calidad de vida general y ayudar a enfrentar condiciones como la fibromialgia, el dolor, la fatiga y la depresión. Además, se ha demostrado que beneficia a personas con insuficiencia cardíaca crónica o cáncer, mejorando la calidad del sueño y favoreciendo funciones mentales como el aprendizaje y la memoria.
Este descubrimiento se produce días después de otro estudio que reveló que el Tai Chi también puede ralentizar la progresión de la enfermedad de Parkinson, brindando aún más razones para considerar este antiguo arte marcial como una opción de ejercicio integral.